miércoles, 9 de febrero de 2011

Sobre los buenos y los malos

No sé qué tipo de clases de Historia están dando en la ESO, pero sí conozco la propaganda de la derechona, ahora autodenominada liberal, pero vamos, son el mismo perro con el mismo collar algo restaurado.

El otro día discutía con un compañero veinteañero (carne de LOGSE) de trabajo -porque no aprendo a cerrar la boca y dejarlos en su puto bucle patriótico, anticatalanista, españolista y rojigualdista- cuando no sé a cuento de qué dijo esa tan manida frase de "en la guerra civil no hubo buenos ni malos, hay que pasar página". Odio el pasarpaginismo. No es más que los que estuvieron abusando durante 40 años se vayan de rositas. Y de hecho, ya se fueron.

En la guerra civil sí hubo buenos y malos. Además es bastante fácil de entender. Había un señor que era rey que dejó decidir al pueblo si querían que siguiera de rey. El pueblo dijo que no y el rey se fue. Los que gobernaban posiblemente no fueran tan lamentables como los gobernantes de ahora y los había de izquierdas y de derechas. Pero había otro señor canijo, gallego y monocojón al que no le gustaba esto, así que soliviantó a los militares, montó un golpe de estado, una guerra y mandó por su cojón durante 40 años llenando España de curas y monjas. Durante esos 40 años y sobre todo al principio fusiló a todo aquel que le pareciera sospechoso de ser opositor a su agraciado régimen.

De este pequeño párrafo escrito para deficientes mentales y jóvenes LOGSE se puede deducir fácilmente que el monohuevo y sus secuaces eran los malos y los otros los buenos. ¿Fácil, no? En todas las guerras muere gente y a diferencia de el equipo A, aquí los buenos también se cargaron algún malo.

2 comentarios:

  1. "Canijo, gallego y monohuevo" jaaaaaaaaaaaaaauauaua, meca, meca, vaya bueno.
    Bien pegáo, sí señor.

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