Estoy escuchando las noticias de la radio, en un medio de difusión nacional, y a propósito de la "noticia" de la visita del romano que por el morro ostenta, entre otros, el mando de Capitán General de las Fuerzas Armadas españolas Juan Carlos I, a unas instalaciones industriales en Albacete que participarán en la fabricación de un nuevo artilugio volador militar llamado Eurocopter, dos de los "periodistas" tuvieron los santos cojones de soltar por sus bocas estas, a mi juicio, soberanas gilipolleces:
-S. M. don Juan Carlos PILOTARÁ uno de los prototipos del modelo en el que se basa el Eurocopter.
-Suponemos que S. M. pilotará acompañado.
-No, bueno, pilotará pero SIN VOLAR.
Silencio de dos segundos.
-Ah, bien, vale, quieres decir que pilotará sin vuelo.
-Exactamente, S. M. pilotará sin vuelo el nuevo prototipo de Eurocopter.
Y en este vórtice periodístico de dos segundos, en esta laguna argumental de noticia, el director del programa -de difusión nacional- no tuvo huevos a expresar lo que, sin duda, su mente espontáneamente pensó durante ese lapso de dos segundos, que es:
-Aaaaaah, sin volar... Entonces, ¿QUÉ COJONES VA A PILOTAR ESE SUBNORMAL?
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